ALLANARON QUINTA DE UN COMISARIO EN LA CAUSA POR EL CRIMEN DE MORELLO Y LA DESAPARICIÓN DE ESCALANTE

ALLANARON QUINTA DE UN COMISARIO EN LA CAUSA POR EL CRIMEN DE MORELLO Y LA DESAPARICIÓN DE ESCALANTE

Una casaquinta que pertenece al comisario de la Policía bonaerense Francisco Centurión, padre y tío de los dos detenidos por el crimen de Lautaro Morello, el joven hallado asesinado y calcinado tras desaparecer en diciembre pasado en el partido de Florencio Varela junto a su amigo Lucas Escalante, de quien nunca más se supo nada, fue allanada en las últimas horas en busca de evidencias, informaron fuentes judiciales.

Se trata de una vivienda situada en la localidad de Bosques, partido de Florencio Varela, que pertenece al comisario mayor de la delegación Drogas Ilícitas de Quilmes, quien es padre de Cristian Centurión y tío de de Maximiliano Centurión, detenidos en la causa por el crimen de Morello (18) y la desaparición de Escalante (26), añadieron los voceros.

En el marco del mismo expediente fueron apresados el comisario Sergio Enrique Argañaraz, acusado del encubrimiento del hecho, y el oficial Ramiro Yair Forchinito, por falso testimonio.

Según detallaron las fuentes a Télam, el operativo fue encomendado a efectivos de la División Homicidios de la Policía Federal Argentina (PFA) por el fiscal a cargo de la causa, Daniel Ichazo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada 1 de Berazategui.

«Se relevó información en la quinta de Centurión que habían aportado testigos de identidad reservada. El resultado fue positivo», indicó una fuente que participó del procedimiento.

En el lugar se inspeccionó una pequeña construcción y un galpón que no habían sido allanados durante el primer procedimiento en el lugar realizado el 14 de diciembre pasado, luego de la detención de los Centurión.

Para esta jornada, el fiscal Ichazo tiene previsto continuar con las declaraciones testimoniales y la obtención de información para realizar nuevos allanamientos en los próximos días.

Los últimos arrestos que se realizaron en el marco de la pesquisa fueron los de los policías Argañaraz y Forchinito.

El comisario Agañaraz, titular de la comisaría 4ta. de Bosques, está acusado por «encubrimiento calificado por ser el delito precedentemente grave y por su condición de funcionario público en concurso real con incumplimiento de los deberes de funcionario público».

Ichazo pidió la detención del jefe policial al establecer que en primer lugar se negó el 10 de diciembre de 2022 a recibirle la denuncia por «averiguación de paradero» a la madre de Escalante, quien en ese momento era buscado junto a Morello.

Además, el fiscal lo acusó de haber ayudado a Cristian y Maximiliano Centurión al eludir la investigación del homicidio, ya que la familia le aseguró que uno de ellos había estado el día anterior con ambos jóvenes.

Por su parte, el oficial Forchinito, quien era parte de la fuerza bonaerense desde fines de 2017 y desempeñaba tareas en un área de enlace con Interpol, fue acusado de «falso testimonio» porque cuando la justicia le pidió que entregara su teléfono celular entregó otro que no le pertenecía.

Escalante fue visto por última vez el viernes 9 de diciembre en la localidad de Bosques, partido de Florencio Varela, cuando pasó a buscar a Morello para salir a festejar el triunfo de la Selección Argentina ante Países Bajos por las semifinales del Mundial de Qatar a bordo de un auto BMW que al día siguiente apareció incendiado.

El cuerpo semicalcinado de Morello fue hallado cerca de las 21.30 del 15 de diciembre a la vera de la autopista en construcción Buen Ayre, en Guernica, partido de Presidente Perón, y nada se sabe aún de Escalante.

Los Centurión fueron detenidos tras el análisis de cámaras de seguridad y de antenas de telefonía celular, ya que en una grabación de una estación de servicio de Florencio Varela se ve a Cristian cerca de las 0.30 del 10 de diciembre cargando nafta en un bidón blanco que se sospecha pudo haber sido empleado para incinerar el auto de Lucas y el cadáver de Lautaro.

En tanto, en marzo último el Gobierno nacional elevó de cuatro a cinco millones de pesos la recompensa para aquellas personas que aporten datos que permitan dar con el paradero del joven.