La producción de acero crudo alcanzó en agosto a casi 420.000 toneladas, una suba del 22% con respecto al mes anterior y bajó 7,5% comparado con el mismo mes del 2022, según informó la Cámara Argentina del Acero (CAA).
En cuanto a los productos laminados, la suba intermensual fue del 15%, mientras que la interanual representó una caída del 7,1%.
En un comunicado, la CAA señaló que «esta recuperación con respecto a julio corresponde a la normalización de la actividad tras el conflicto gremial, que afectó también la provisión a la cadena de valor metalmecánica y la construcción».
La CAA indicó que «continúan las dificultades para el acceso al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) para la importación de materias primas no producidas en el país, así como para la importación de productos semielaborados e insumos y repuestos necesarios en el ciclo productivo».
El documento de la CAA destaca que «por otro lado, permanecen las dificultades para obtener las aprobaciones para el pago de fletes y servicios mediante las Sirase. Esto ocurre tanto para insumos importados por las acerías como también por sus proveedores. Debido a esto, la situación se torna crítica respecto de algunos repuestos imprescindibles que podrían poner en riesgo las instalaciones».