El embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, dijo hoy en la Casa de Gobierno que el «gran desafío» del Gobierno nacional es «sostener el crecimiento y los puestos de trabajo, y alentar inversiones».
Luego de reunirse con el presidente Alberto Fernández en la Casa Rosada, Scioli destacó «varias cosas positivas» con el ingreso del ministro de Economía, Sergio Massa, al Gabinete nacional, poco más de un mes atrás.
«Destaco varias cosas positivas porque se ha logrado estabilizar, regenerar expectativas y fundamentalmente orientando su esfuerzo a algo central que es conseguir dólares para la economía para que se vuelque al aparato productivo», dijo Scioli ante la consulta de Télam y apuntó que el «gran desafío es sostener el crecimiento, sostener los puestos de trabajo y alentar inversiones».
«Es un momento de emergencia y Argentina tiene con qué. Confío en la energía, en la fuerza emprendedora del país, en lo que es el sector de minería. Hablamos esto con el Presidente: la demanda de litio, de cobre, de integrarnos con Brasil, lo que es el tema del agro y fundamentalmente la obra estratégica que es el gasoducto», explicó el embajador.
Por otra parte, subrayó que su «primera etapa» como embajador, que se interrumpió brevemente dos meses atrás con su designación como Ministro de la Producción, fue «reconstruir la relación y volver a convertir a Brasil en el primer socio comercial».
«Brasil nos dio la seguridad energética para atravesar el invierno y tuvo un impacto porque significó un ahorro de divisas y otros avances en materia de economías regionales», enumeró el diplomático.
Al respecto, puntualizó que esta segunda etapa ahora tiene «un objetivo central en este contexto internacional donde hay que fortalecer la región».
«En eso coincidimos con el Presidente: el eje Argentina-Brasil es clave; tenemos la integración financiera y ayer hubo un encuentro entre los presidentes de los bancos centrales para potenciar el pago en monedas locales y desdolarizar todo lo que es el comercio bilateral».
Asimismo, sostuvo que es central «la integración energética, porque Brasil necesita gas y está interesado en financiar parte de la segunda etapa del gasoducto, particularmente el tramo de Saliqueló, que llega a la frontera con Brasil».
En ese plano, Scioli mencionó también el «tema de la integración industrial y de seguridad alimentaria que implica logística e infraestructura».