Un adolescente de 17 años falleció ayer luego de haber sido baleado en la cabeza por la Policía cuando viajaba en un auto denunciado como robado junto a otros tres menores en la localidad bonaerense de La Reja, partido de Moreno, y su familia denunció que fue un caso de «gatillo fácil» y reclamó que investiguen a los policías.
En tanto, fuentes judiciales indicaron que dos de los adolescentes que viajaban con el fallecido fueron detenidos ya que tenían pedido de captura por distintos homicidios, mientras que el menor restante se dio a la fuga.
El hecho en cuestión tuvo lugar la noche del pasado 18 de marzo, cuando agentes de la Comisaría 7ma. de La Reja interceptaron desde un patrullero a un auto Volkswagen Gol de color blanco con pedido de secuestro que circulaba por la avenida Monsegur al 1.400, en la mencionada localidad del oeste del conurbano bonaerense.
Allí, los uniformados señalaron que mantuvieron un presunto tiroteo con los ocupantes del vehículo, los cuales eran cuatro menores de 17 años.
En ese contexto, Mateo González (17), que viajaba en la parte de atrás del rodado, recibió un impacto de bala en su cabeza y otros dos en la pierna derecha, por lo que debió ser trasladado de urgencia al Hospital Luciano y Mariano de la Vega, emplazado a unas 30 cuadras de la escena.
Finalmente, González falleció ayer por la mañana luego de permanecer tres días en terapia intensiva, situación ante la cual sus familiares se agruparon frente a la Comisaría 7ma. de La Reja para reclamar justicia y denunciar que fue un caso de «gatillo fácil».
«Como algunos de los chicos que iban en el auto tenían pedido de captura se asustaron y se dieron a la fuga. Eso lo veo mal, pero ahí los embistieron con un patrullero. Los pibes no tenían armas en el auto, a mi hijo me lo asesinaron estos dos policías. Están las cámaras y se puede ver. Lo mataron a quemarropa», afirmó el padre del menor, Cristian González, en diálogo con un medio local.
A continuación, el papá de Mateo agregó: «Las fuerzas actuaron mal, abrieron las puertas de un auto y dispararon sin dar la voz de alto. Mataron a un menor. Mi hijo no era delincuente. Se equivocaron, vamos a ir atrás de la verdad, queremos que estos policías estén detenidos».
Por otro lado, una fuente judicial con acceso a la causa indicó a Télam que González no tenía antecedentes ni ningún pedido de detención vigente.
Sin embargo, los voceros manifestaron que los ocupantes del Volkswagen Gol «tenían al menos un arma» ya que «venían de cometer el robo de ese auto un rato antes» y que, en esa circunstancia, «habrían disparado contra el personal policial», aunque aclararon que dicha versión «es una hipótesis preliminar» y que «faltan pericias para corroborarla».
En cuanto a los policías involucrados en la muerte de Mateo González, fuentes judiciales aseguraron que el fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Moreno, Leandro Ventricelli, no tomó ningún temperamento para con ellos.
Además, los informantes confirmaron que dos de los menores que viajaban en el auto con González tenían pedidos de captura por distintos homicidios cometidos en la localidad de Moreno.
Al respecto, señalaron que uno de ellos estaba sindicado de haber participado del asesinato de Lucas Benítez, suceso ocurrido durante la noche del domingo 12 de marzo en el barrio Villa Anita, causa que investiga la UFI 6 de Responsabilidad Juvenil, a cargo de la fiscal Alejandra Piqué; mientras que el adolescente restante había escapado en las últimas semanas de un instituto de menores en el que estaba alojado acusado de un homicidio en la localidad de Merlo.