El presidente Alberto Fernández, la vicepresidenta Cristina Fernández y el ministro de Economía y precandidato presidencial de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, inauguraron el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) con llamados a la «unidad» del peronismo y el reconocimiento de medidas de gestión que fueron relevantes para el desarrollo de la obra, tales como la nacionalización de YPF y la sanción del Aporte Solidario y Extraordinario a las Grandes Fortunas.
Los tres referentes de UxP compartieron el escenario en la ciudad bonaerense de Salliqueló, en el oeste bonaerense, no muy lejos del límite con La Pampa, junto al gobernador Axel Kicillof y el jefe de Gabinete Agustín Rossi, también precandidato a vicepresidente por la coalición oficialista.
El acto, que coincidió con una nueva conmemoración del Día de la Independencia, significó además la primera foto de unidad de los referentes de UxP desde el cierre de listas del 24 de junio último.
Como oradores de la actividad, los tres destacaron la trascendencia de la construcción del gasoducto para el cambio de la matriz económica, al coincidir en que la obra permitirá reducir la importación de energía para pasar a exportar gas a países limítrofes, además de abastecer al consumo domiciliario y abaratar el suministro para la industria local.
A la hora de las definiciones electorales, el presidente Fernández llamó a «preservar la unidad de los que queremos que la Argentina crezca y avance» y advirtió que «las elecciones se avecinan y no todo es lo mismo en política».
El mandatario también afirmó que «no hay ninguna posibilidad de que un país se desarrolle si el Estado no está presente» para «llevar las obras que hacen falta e impulsar las políticas necesarias».
Tras apuntar que «la diferencia de precios que hay entre el gas extraído Vaca Muerta y el que viene en un barco importado es de 400%», Fernández reafirmó que está «convencido» de que «si el Estado no está presente, la Argentina no se desarrolla».
«El destino me ha permitido que empecemos a declarar la independencia energética un 9 de Julio en el corazón de la provincia de Buenos Aires», dijo, y destacó: «Pudimos hacer este gasoducto con recursos nuestros, empresas argentinas y trabajadores argentinos, que nos está garantizando que el gas llegue a los lugares de desarrollo que más lo necesitan».
También se tomó un momento para marcarle a Clarín el cumplimiento de los plazos establecidos para la obra; en ese momento recordó un artículo de abril de 2022 publicado en ese diario en el que se mencionaba el tema «muy chiquito» junto a una foto suya refregándose los ojos por el viento con arena que le llegaba de frente.
«Tengo una satisfacción personal muy grande porque lo hicimos», remarcó entonces, y reiteró: «Clarín, este es el gasoducto que te dije que íbamos a hacer».
Por su parte, la Vicepresidenta parafraseó una consigna emblemática del kirchnerismo al resaltar que la inauguración del gasoducto Néstor Kirchner «no fue magia», y destacó que los «573 kilómetros» que abarca la primera etapa de la obra «vienen a coronar la recuperación» de YPF.
Al recuperar la historia de la petrolera estatal, Cristina Kirchner se refirió al proceso de nacionalización de la empresa, que hasta el año 2012 estuvo en manos de la multinacional española Repsol.
Recordó asimismo que en tras la nacionalización de YPF desde sectores opositores y empresarios plantearon que había comenzado «la fase expropiatoria del kirchnerismo», pero ella replicó que los causales de esa decisión fueron el «vaciamiento» y la desinversión que atribuyó a la empresa española.
«Acá no estamos haciendo unas diatribas en contra de lo privado. Simplemente estamos hablando del comportamiento de una empresa que podría haber sido vista como lo ideal, una gran multinacional que vino y compró YPF (por Repsol). ¿Y cuál fue el resultado? El resultado fue el vaciamiento total», puntualizó.
Y reiteró que la nacionalización de YPF debió ser tomada «cuando por primera vez en la Argentina habían caído la exploración, la producción y las reservas (de petróleo) en un 50%».
La escuchaba Máximo Kirchner, titular del PJ bonaerense y uno de los autores -junto al también diputado Carlos Heller- del proyecto de Aporte Solidario y Extraordinario de las Grandes Fortunas.
La Vicepresidenta se tomó parte de su discurso es responder los cuestionamientos de parte del sector empresario; apuntó, sin eufemismos, a que en ese ámbito suelen hacer «concursos para ver quién dice la boludez más grande».
Citó puntualmente la frase de un empresario, a quien no nombró, respecto de que «la dirigencia política ha tomado durante muchos años las decisiones equivocadas que nos han llevado a las circunstancias en que nos encontramos».
Luego dijo que estaba en contra de las generalizaciones y que no se podía hablar en esos términos de «todos los empresarios» como tampoco de «todos los dirigentes políticos».
Además, la exmandataria y titular del Senado puntualizó que la «balanza negativa» en energía «no la provocó ningún político ni empresa estatal» sino una «multinacional» que «a partir de aumentar los precios del combustible obtenía ganancias extraordinarias» (por Repsol).
Del mismo modo que, dijo, el «problema» de la deuda con el FMI no lo ocasionó un «político» sino un «empresario».
«El problema del FMI no lo trajo un político, sino un empresario; el que era presidente era del bando de los empresarios», señaló, en alusión al exmandatario Mauricio Macri.
Sobre el Gasoducto Néstor Kirchner, señaló que si bien se busca «exportar» gas, el otro objetivo es garantizar «gas y petróleo para nuestra industria», y para que sea «más competitiva».
Añadió que otro objetivo primordial será llegar con el gas a «los hogares argentinos» ya que, remarcó, «no es justo que si tenemos la segunda reserva gas del mundo no convencional nos quieran cobrar las cosas a precio dólar y precio internacional».
También dedicó varios pasajes de su discurso a destacar el desempeño de Massa desde que asumió en Economía, en lo que fue leído como un respaldo por elevación en su condición de precandidato presidencial del sector mayoritario de UxP.
A Massa le agradeció que se hubiera cargo del Ministerio de Economía «en un momento muy difícil» y el esfuerzo puesto a toda hora.
«Sergio, fuiste para adelante y eso siempre es bueno. La función pública es 24×24 y, si no le ponés empeño, seguro no te sale», valoró la expresidenta, al dirigirse varias veces a Massa por su nombre.
A su vez, el ministro de Economía, que inició la ronda de discursos, destacó que la obra constituye el «principio del cambio en la matriz económica y energética» del país, y ponderó que ya no habrá necesidad de «importar gas en barco porque vamos a usar el gas de nuestro subsuelo», así como tampoco, dijo, se importará gas de Bolivia a raíz de que el «norte argentino va a estar alcanzado por el gas de Vaca Muerta».
El precandidato a la Presidencia ponderó, también, la posibilidad de «exportar a Chile y al sur y centro de Brasil» y se entusiasmó con la posibilidad de que Argentina «pase de ser un país con déficit de dólares por tener que importar energía a un país con superávit de dólar en su balanza comercial».
Además, destacó a quienes idearon el proyecto de ley que permitió crear el «Aporte Solidario», que contribuyó a financiar la construcción del gasoducto.
«Agradezco a las empresas argentinas que cumplieron en tiempo y forma con los plazos; también a los gobernadores, a los legisladores que votaron el Aporte Solidario en el Congreso, a los autores del proyecto, Máximo Kirchner y Carlos Heller», puntualizó.
En ese punto, destacó que los argentinos que -por su nivel patrimonial- quedaron incluidos en el Aporte Solidario y lo pagaron al fisco se les enviará una «carta agradeciéndoles», mientras que lamentó que quienes «no pagaron» hayan perdido la «oportunidad de ser parte de algo que por 30 años los argentinos lo van a disfrutar».
Y anunció que en septiembre se llamará a licitación para el segundo tramo del Gasoducto, que irá desde Salliqueló a la localidad santafesina de San Jerónimo, para «terminar de abastecer el litoral argentino».
El acto se llevó a cabo en la estación de medición Salliqueló, a la vera de la ruta provincial 85, altura kilómetro 285, junto a la planta compresora Saturno, donde se conecta con la red troncal.
En las sillas de las primeras filas se ubicaron miembros del Gabinete como el ministro de Interior y precandidato a senador, Eduardo ‘Wado’ Pedro, y los ministros Gabriel Katopodis (Obras Públicas); Jorge Taiana (Defensa), Victoria Tolosa Paz (Desarrollo Social) y el canciller Santiago Cafiero.
Participaron también los gobernadores La Pampa, Sergio Ziliotto, y de Neuquén, Omar Gutiérrez, quien se conectó desde su provincia, además de la secretaria de Energía Flavia Royon; el titular de Enarsa, Agustín Gerez, y el presidente de YPF, Pablo González.