El ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, afirmó que la Argentina se encuentra ante «una muy buena temporada» y planteó el desafío de «sostener este nivel», destacando que «hace 16 meses que el turismo está entre los sectores que lidera la recuperación del empleo junto con la actividad industrial, la construcción» en el país.
En declaraciones a Télam Radio, Lammens señaló que «el primer tramo de las vacaciones de verano permite afirmar que está registrándose una muy buena temporada en todos los destinos turísticos del país» y dijo que para 2023 tienen planteado el desafío de «sostener este nivel de demanda todo el año».
Puntualizó que el Turismo, «es el sector que, en la variación interanual económica, más crece, genera puestos de trabajo a lo largo a lo ancho del país y esto no es menor, porque tiene una distribución federal de la demanda de empleo y eso para la Argentina es muy necesario».
Destacó que la coyuntura favorable es producto de que «el sector público es el que está generando las condiciones para que el sector privado invierta, gane dinero, por supuesto, y que lo vuelva a invertir para generar trabajo. Ese es el rol que queremos cumplir como sector público».
Remarcó que «noviembre marcó superávit en la balanza turística, es el sexto mes en la serie de los últimos 83 que esto sucede, así que imagínense la buena noticia que significa para la Argentina en este contexto donde necesitamos generar divisas, generar dólares para que el país crezca, para que la industria crezca, tener cada vez más turistas que nos visitan y niveles de recuperación de los más altos de la región me parece que es una gran noticia».
Sobre las perspectivas del sector, Lammens manifestó que «la previsión de la Organización Mundial de Turismo y de los organismos internacionales es que la recuperación total se estará dando en el 2025», aunque aclaró que, no tiene «ninguna duda de que en 2023 la Argentina va a estar en los niveles de 2019, superando esos números, superando el nivel de gasto de 2019».
En cuanto a la temporada en marcha, expresó que están «muy contentos porque era todo un desafío mantener los niveles de ocupación que tuvimos el año pasado, de absolutamente récord».
«Y la vara estaba muy alta y bueno, por supuesto que nos tenía ahí un poco inquietos, pero por suerte ya, si bien es prematuro hacer un balance de la temporada, habiendo transcurrido más de 10 días de enero podemos decir que estamos ante una muy buena temporada en todos los destinos turísticos», indicó.
Lammens detalló que estuvo recorriendo la Costa Atlántica en las últimas dos semanas, reuniéndose también con el sector privado, prestadores, sector hotelero gastronómico y afirmó que todos «hablan de una muy buena temporada con niveles similares a los del año pasado, así que contentos y con energías renovadas para ver si 2023 puede marcar un nuevo récord».
«Tenemos algunos desafíos importantes que tienen que ver con sostener este nivel de demanda todo el año, que prácticamente no haya temporada baja, para eso vamos a tener algunas herramientas importantes como el PreViaje 4, pero en líneas generales muy contentos y también contentos con lo que tiene que ver con el turismo receptivo», sintetizó.
Hizo mención en particular, al Turismo Social, apuntando que hace poco estuvieron «en Chapadmalal inaugurando el Hotel 7 y la verdad que cuando vamos uno se vuelve con la energía renovada, porque cuando uno tiene un cargo de tanta responsabilidad hay mucho desgaste, mucha presión, pero cuando uno va a esos lugares y ve que la gente que está veraneando, chicos que vienen de todas partes del país a conocer el mar y los ve disfrutar, uno siente que tanto esfuerzo vale la pena y que además hemos recuperado, Chapadmalal y Embalse».
«La verdad – agregó- que me cuesta pensar en qué argentino o argentina no esté de acuerdo en que haya lugares en donde quienes tienen menos posibilidades o que de otra forma no podrían ir a conocer el mar, que el Estado les garantice el derecho también a vacacionar».
E insistió en que «hay que poner en valor esos predios que son maravillosos, que son parte del patrimonio histórico, arquitectónico y sobre todo el patrimonio emocional de la Argentina, millones y millones de argentinos pasaron sus vacaciones ahí, fueron en viajes de egresados, conocieron el mar».
«Son dos lugares icónicos, que estaban abandonados y que hoy miles y miles de argentinos los pueden disfrutar, es una gran noticia y eso habla de un país que es más justo, que da posibilidades a todos, sobre todo pienso en los más chicos, las más chicas, que si no existiera Chapadmalal no hubieran conocido el mar y si no existiera Embalse no hubieran sabido lo que son las sierras cordobesas», concluyó.