“Para ordenar el país tenemos que hacer cumplir todos los servicios esenciales y tenemos que dejar bien claro cuáles son. Yo quiero llegar al extremo de decir, hay espacios donde el derecho de huelga atenta, no solo contra la vida, sino contra el futuro.”
Ratificando el fuerte compromiso con la educación, uno de los principales de los ejes de su campaña, la candidata a Presidente, Patricia Bullrich, se reunió con las agrupaciones de Jóvenes organizados y Padres organizados, quienes se pusieron al frente del reclamo para que retomaran las clases en la cuarentena decretada por el Gobierno Nacional.
Al momento de conversar con los presentes, Bullrich se comprometió a llevar al Congreso la discusión de declarar a la eduación como servicio básico esencial, expresando que: “Lo primero que me parece que es fundamental, son los deberes y las obligaciones que tienen que estar claramente reglamentados. Y en esa reglamentación está el servicio básico universal de la Escuela. Es que es un debate muy fuerte y la estoy discutiendo con muchos constitucionalistas, nuestro equipo está revisando toda la legislación argentina. El concepto es que cuando vos declaras un servicio básico universal, lo que vos declarás es que el no cumplimiento de ese servicio, tiene una responsabilidad grave.”
Afirmó que es fundamental asegurar que los estudiantes tendrán 190 días de clases, y que, en caso de querer tomarse alguna medida de fuerza, deberá hacerse sin afectar el normal dictado de las mismas. Sobre el punto, expresó: “La base de la constitución de un servicio básico universal es el cómo vos construís la responsabilidad, en cómo cae la responsabilidad sobre los actores que intervienen. Nosotros planteamos que tiene que haber una cantidad mínima de días de clases, 190 días, y cualquier medida de fuerza que decidan tomar, debe ser por fuera de los 190 días, porque si no se achica la capacidad del futuro que tiene ese chico o chica, si en vez de 190 días tiene 180 días.”
Agregando: “¿Cómo se discute entonces el servicio esencial en la educación? Se discute diciendo que lo esencial es que ese chico o chica tenga todo el conocimiento que necesita tener en ese periodo de formación escolar. Si ese chico no tiene todo el conocimiento que necesita tener en ese periodo escolar, cuando pase al próximo no a tener a una buena base. Si los docentes no tienen un buen secundario cuando entran al Instituto de Formación Docente, no van a ser buenos docentes. Entonces, es una discusión que vamos a llevar a la Corte Suprema de Justicia y va a ser una discusión muy fuerte, porque es una discusión en la que chocan dos derechos constitucionales, el derecho a la huelga y el derecho a la educación.”
Y concluyó: “Para ordenar el país tenemos que hacer cumplir todos los servicios esenciales y tenemos que dejar bien claro cuáles son. Yo quiero llegar al extremo de decir, hay espacios donde el derecho de huelga atenta, no solo contra la vida, sino contra el futuro.”
En el marco del encuentro, uno de los jóvenes presentes, brindó un fuerte discurso a la candidata, en el que expresó: “A los jóvenes ya no nos importa si el Estado se estúpido o se hace estúpido. Nosotros nos egresamos en 2020, pleno momento de pandemia, pleno quiebre de todo. Y fuimos los primeros locos de acá que armamos esas famosas manifestaciones en el Palacio Pizzurno, queríamos volver a la escuela. Nos frustra la idea que tiene el gobierno sobre el propio chico.” Y afirmó: “No necesitamos palabras más tranquilas, lo que necesitamos es confiar en nuestro país, confiar en que, si hoy nosotros vamos a ir a una carrera universitaria, podemos lograr un buen empleo. Si hoy todos terminamos en secundaria en tiempo y forma, vamos a poder alquilarnos un mono ambiente. Cuando esas cosas no pasan, cuando se da un punto de quiebre, creo que ahí es donde los jóvenes empezamos a perder la confianza y también la esperanza en la política.”
Y para cerrar afirmó: “Hoy tenés 8 de cada 10 chicos que se van a ir a del país. ¿Pero quiénes nos quedamos? ¿Quedamos los que nos queremos quedar o solo quedan los que no se pueden ir? Por eso, nuestra generación tiene que responder con política, tiene que salir a la calle y decir que estas son las cosas que no nos esperamos. Pero nosotros tampoco compramos modelos de países extremistas. Cuando escuchamos, por ejemplo, la locura de que eliminemos la ESI, quiere decir que nunca pisaron una escuela. Cuando hay propuestas tan extremistas, es porque no se pisó nunca una escuela. El trabajo que para mí tiene nuestra generación, es defender el modelo de país que queremos, que es el que los chicos se queden acá, porque este es su país.”
En el marco del encuentro se encontraron presentes los diputados nacionales Fabio Quetglas y Sabrina Ajmechet.